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Domingo 28 de Agosto de 2016, casi sin planearlo, nos vamos a explorar la fervenza en la cabecera del río Tea.
Atravesando de nuevo el territorio del lobo, pasamos por el Santuario de la Xestosa sin detenernos, ya que precisamente ayer se celebraba la romería y la concurrencia de gente al lugar era tan elevada que no cabía ni un alfiler.
A pesar de las indicaciones recogidas en la web, nos encontramos con buen acceso para el vehículo, prácticamente hasta Ponte Abuíña. Desde allí, siguiendo el trazado del antiguo canal hacia el Sur Oeste, son unos 650 pasos (800 pasos de Bea) hasta la cascada.
La fervenza queda aproximadamente a la altura de la Carballeria do Rei, aunque el acceso directo tal vez esté cerrado por la maleza (y cuando decimos maleza, estamos hablando de tojo salvaje que sobrepasa la altura de nuestras cabezas), además de que la pendiente a salvar resulta mas pronunciada que si vamos rodeando por la pista.
Aguas limpias (vimos numerosas truchas en el cauce del río), acceso recientemente desbrozado y acondicionado, y una linda cascada con ámplias pozas cristalinas que invitan a nadarlas. Un pequeño lugar de una belleza sobresaliente, y a día de hoy fuera de la Red Natura 2000.
Desde el arco del Puente Abuíña hasta la fervenza, y tal vez un poco mas abajo, el descenso del cauce puede resultar interesante, aunque probablemente sin mayores complicaciones, ya que durante el recorrido por el canal se apreciaba el sonido de numerosos saltos de agua.
En las inmediaciones del mirador no apreciamos indicios de instalaciones anteriores. De modo que Bea comienza a montar la cabecera de descenso justo a los pies del mirador que domina la cascada.
Volveremos, mas pronto que tarde, con el neopreno para descender el cauce desde el puente y curiosear un poco mas a bajo de las pozas bajo la fervenza.
Llegamos practicamente al lado del puente y aprovechamos para tomar un refrigerio protegidos por la sombra del arco, al borde del agua.
Continunamos unos 500 metros, siguiendo el viejo canal, hasta la fervenza, perfectamente señalizada.
Justo debajo del mirador hay una zona cómoda para comenzar la línea de instalación.
Bajo la cascada las pozas son amplias y cristalinas.
Para ver la segunda parte de esta acitvidad, en el blog, pincha aquí.
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